Para entender bien lo que implica la privatización de un servicio público hay que observar cómo se produce todo el proceso.

Recordamos, en el BOE del pasado 13 de Junio de 2012 aparecía el siguiente anuncio licitación: Servicio para la impresión, manipulado y envío de documentos de vidas laborales y bases de cotización de la Tesorería General de la Seguridad Social.

LLama la atención especialmente la palabra ‘manipulado’ dentro de la descripción, y en principio podría parecer la externalización puntual de un servicio, de hecho, la licitación era por sólo 5 meses de duración. Sin embargo, llegamos a día de hoy, momentos de importantes cambios legislativos como consecuencias de las promesas electorales, con dicho servicio manipulado aún por empresas privadas.

Es importante tener en cuenta que dicho servicio implica el acceso continuado y, como bien dice la descripción, la manipulación de una serie de datos de carácter muy sensible como las bases de cotización generadas por las que se calculan las pensiones de jubilación. Así como otros datos personales contenidos a lo largo de nuestras relaciones laborales.

Todo tiene consecuencias. El pasado 6 de octubre publicábamos el anuncio por el que los autónomos con derecho a bonificación podían acceder a la contratación de trabajadores por cuenta ajena sin perder el derecho. Esta nueva situación tomaba efecto a partir del 10 de octubre.

Pues bien, llegados a este punto nos encontramos con la siguiente situación. Las altas posteriores a dicha fecha de efecto con derecho a bonificación no se están ejecutando, esto implica que aquellas altas en el RETA que cumplen los requisitos para su acceso o bien simplemente no están registradas o los cargos que se están ejecutando no corresponden con la nueva situación, por tanto, nos encontramos con situaciones de trabajadores por cuenta propia que o bien no constan como tal en los registros de la TGSS o bien las cuotas que se les han domiciliado no corresponden con la información del alta suministrada. En palabras de los técnicos de la TGSS: Aún estamos esperando, desde octubre, que se puedan implementar las nuevas bonificaciones y poder proceder a registrar dichas altas.

Todo esto nos sugiere algunas cuestiones:

Las empresas adjudicatarias de este servicio, ¿seguirán percibiendo fondos públicos a pesar de no ejecutar el servicio correspondiente?

¿Cuáles serán las consecuencias para los trabajadores autónomos?

¿Cómo afectarán al desarrollo de su actividad?

En cualquier caso, desde Autonomía Sur ofrecemos nuestros recursos y disponibilidad para todos aquellos afectados.

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